Más de un 95 % de las promotoras inmobiliarias chinas que publicaron datos correspondientes al ejercicio 2022 experimentaron una caída de ventas en comparación con el año anterior, según una revisión de sus cuentas llevada a cabo por el portal de noticias económicas Yicai.
El citado medio especifica que hasta 45 de las 47 promotoras que ya divulgaron sus datos provisionales de ventas de 2022 presentan una evolución negativa.
Toto apunta que 25 de ellas vendieron menos de la mitad que a lo largo de 2021.
Entre las compañías de mayor tamaño, destaca la caída del 30 % que presentaron Country Garden o Vanke, mientras que la que experimentó un mejor rendimiento durante el año, Poly Developments & Holdings, redujo sus ventas igualmente en un 14,5 %.
Promotoras chinas con impagos
En la otra cara de la moneda figuran grupos como Sunac (-71,7 %) o R&F Properties (-68 %), firmas que incurrieron en el impago de sus deudas en 2022 junto a muchas otras compañías del sector, en apuros desde que Pekín impulsó en 2020 medidas para restringir el acceso a la financiación a las promotoras más endeudadas.
Según datos oficiales publicados ayer, las ventas inmobiliarias medidas por superficie cayeron un 24,3 % interanual en 2022, mientras que la inversión llevada a cabo en el sector descendió un 10 %, la primera vez que esto ocurre desde que comenzó la serie histórica, en 1999.
Menor crecimiento económico
El crecimiento económico de China en 2022 se desplomó a uno de sus peores niveles en casi medio siglo, debido, en gran parte, a las estrictas restricciones del COVID y la caída del mercado inmobiliario.
China presenta unos débiles datos económicos del cuarto trimestre, al crecer un 2,9 % con respecto al año anterior, superando las expectativas, pero subrayando la carga que supuso la estricta estrategia de «cero contagios».
El crecimiento del 3 % para 2022 está muy por debajo del objetivo oficial del 5,5 %; si se excluye la expansión del 2,2 % tras la propagación del covid-19 en 2020. Se trata del peor resultado en casi medio siglo.
Para 2023, el país asiático aspira a un crecimiento económico del entorno del 5 %.