La arquitectura inclusiva es el camino por el cual la ciudad busca transitar de acuerdo a los planes de la municipalidad.
Según la Arquitecta Paola Constantino, alcaldesa auxiliar de zona 9, somos un municipio que alberga a más de 1.8 millones de residentes. A esto se suman las personas fuera del área metropolitana para desarrollarse en la ciudad, con un total de casi 3 millones.
El dinamismo de la ciudad debe considerar arquitectura inclusiva que contribuya al desarrollo de diversas actividades en una misma ciudad.
Por ello el municipio de Guatemala busca impulsar la competitividad propiciando el desarrollo de proyectos que suplen distintas necesidades humanas, los cuales están diseñados dentro el plan de urbanización de la Municipalidad de Guatemala.
Un ejemplo de arquitectura inclusiva en Guatemala es cómo el sector de la zona 9 se está desarrollando: acceso a transmetro, ciclovías y otros servicios de transporte público que permiten al usuario trasladarse de un punto a otro con opciones rentables y efectivas.
Favorecer el intercambio cultural entre individuos y fortalecer las relaciones sociales para lograr que se conecten en un espacio común es el objetivo primordial de una ciudad inclusiva.
¿Qué es una ciudad inclusiva?
Según el Banco Mundial, una «ciudad inclusiva» tiene el fin de crear un mundo más equitativo y respetuoso.
Su objetivo es beneficiar a todas las personas independientemente de sus características, sin etiquetar ni excluir y proporcionar un acceso equitativo, haciendo ajustes permanentes para permitir la participación de todos, valorando el aporte de cada persona a la sociedad.
¿Qué papel juega la arquitectura?
Dentro de una ciudad inclusiva, la arquitectura juega un rol fundamental basado en una comprensión integral y sostenible del entorno construido en relación a las personas que lo habitan y transitan.
También debe plantear posibilidades de accesibilidad integral para que todas las personas puedan hacer uso de los espacios que conforman el entorno construido con autonomía e independencia.
Es importante recordar que esto no se refiere únicamente a las personas con algún tipo de discapacidad, si no también a quienes requieren servicios específicos para garantizar su comodidad y seguridad.
Para garantizar la funcionalidad dentro de una ciudad con estas características, es necesario educar a la sociedad, abrir las mentes e identificar las oportunidades para ofrecer un mejor estilo a los guatemaltecos; estudiar los países más desarrollados y evaluar que se puede hacer en el país para aplicar esas técnicas.