Los visitantes del ‘High Line’, en Nueva York, habrán notado una nueva especie que echa raíces en medio de las plantas del famoso parque: Una escultura de un árbol artificial de color rosa neón.
La obra, de 25 pies de altura (7,62 metros), es una escultura de la artista conceptual suiza Pamela Rosenkranz, se eleva en medio de sus pares verdes en el parque que une la 10.ª Avenida en West 30th Street.
“Old Tree” es el tercer evento anual de la Línea Alta Plinth y se eleva sobre el histórico sendero ferroviario elevado, sus 16 extremidades pintarrajeadas en rosa intenso para destacarse contra los rascacielos y el cielo neoyorquino.
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La vibrante escultura del árbol artificial sintético color rosa se fabricó afuera San Diego y se envió en dos camones.
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Cada una de las 16 ramas y seis raíces se ensamblaron en el sitio y comprende un marco de acero cubierto de espuma en aerosol, configurado con resina epoxi.
Rosenkranz buscó inspiración en el cuerpo humano para el árbol, sus 145 ramas recuerdan los vasos sanguíneos y capilares humanos. “Old Tree” se exhibe hasta el otoño de 2024.
La artista aplicó la pintura rosa rojiza brillante como lo hace en sus lienzos, con siete capas cubiertas con un recubrimiento UV transparente.
Un árbol rosa que se inspira en arañas
El trabajo de Rosenkranz se seleccionó entre 80 propuestas solicitadas a artistas en 40 países, nominadas por asesores internacionales y publicadas en el sitio web de ‘High Line’ en 2020.
La obra se inspiró en las esculturas monumentales de arañas de Louise Bourgeois al diseñar las raíces animadas de su árbol que parecen estar luchando desde el pedestal.
“Esta pieza se destacó de inmediato debido a la ambición de escala. El color es algo increíble que lo llevó a otro nivel”, dijo Cecilia Alemani, directora del ‘High Line Art’ durante la instalación de la obra.
“Es como la plaza central en un pueblo con un árbol y bancos a su alrededor”, agregó la también curadora en jefe.
“Hay un poco de aspecto humorístico”, dijo a NTY la artista de 43 años de edad que vive en Zúrich (Suiza), “como si al árbol le gustaría dejar su plantador”.
