El proyecto de ‘Casas a 1 euro’ entra en una nueva fase de desarrollo para devolver población a zonas rurales y rehabilitar viejas viviendas. En la pequeña localidad de Ollolai, en la isla de Cerdeña (Italia), se ofrecen los primeros arrendamientos a un precio simbólico tanto en casas como en locales comerciales. En un principio, estarán disponibles 30 viviendas y 20 locales.
Ollolai es un pueblo del interior de Cerdeña, en la provincia de Nuoro, parte de la red de municipios que habían lanzado el proyecto de ‘Casas a un euro’ para mejorar el entorno de la zona luchando contra la despoblación y conseguir reformar y rehabilitar el envejecido parque residencial. Ahora lanza la fase 2,0 en la que también ofrece alquileres por solo un euro.
Tanto ciudadanos italianos como extranjeros podrán participar en esta iniciativa, pero que tendrá que cumplir un requisito fundamental: certificar la voluntad de trasladar la residencia al municipio de Ollolai y, al mismo tiempo, demostrar que se tiene un plan de vida en el pueblo de Cerdeña. Para ello, se tendrá que pasar una entrevista personal.
Alquileres a 1 euro
Este alquiler al precio simbólico de 1 euro se mantendrá durante cinco años, tras los cuales el alquiler estará sujeto al mercado libre. En la actualidad el precio medio de un alquiler en la zona se encuentra en €250/mes.
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El proyecto ha sido promovido por el Ayuntamiento en colaboración con la cooperativa Comunidad de Ollolai y la Confederación Aepi (Departamento Nacional de Zonas Rurales y Montañas).
También se ponen en marcha beneficios adicionales para los que participan, como bonificaciones para bebés de hasta tres años, libros de texto gratuitos, aportaciones al transporte escolar, actividades y talleres lúdicos.
“Nuestro objetivo es que la gente descubra la otra cara de Cerdeña, la del interior, la de los aromas, sabores, arqueología y el inmenso patrimonio que queremos conectar”, según Efisio Arbau, responsable de las zonas de montaña de Aepi.
Ollolai: casas a un precio módico
En 2018, Ollolai se propuso combatir la despoblación con una original iniciativa: puso en venta 200 casas abandonadas por el módico precio de 1 euro.
La ganga inmobiliaria esconde un pequeño truco: las 200 casas construidas en piedra estaban en muy malas condiciones. Los compradores debían renovarlas por completo en un plazo de tres años, lo que podía significar un extra de varios miles de euros.
A pesar de las penosas condiciones de conservación, para febrero de 2018 se vendieron tres casas. Asimismo, se recibieron más de 100 solicitudes de países de todo el mundo, incluyendo Rusia y Australia.
Según un artículo de elPeriódico (España), en el último medio siglo la población de Ollolai pasó de 2.250 a 1.300 habitantes, y apenas nacen un puñado de bebés al año.