La compañía prepara la vuelta a las oficinas tras la crisis del covid. De hecho, Google cree que los más de 200 mil trabajares que tiene repartidos por todo el mundo podrán volver a sus sedes en julio de este año.
Aunque la idea de la empresa es que esta vuelta se compagine con el trabajo en remoto. Por este motivo pretende hacer sus oficinas más flexibles y colaborativas para favorecer la implantación de este sistema híbrido.

En paralelo, el director ejecutivo, Sundar Pichai, envío una carta con consejos para evitar la saturación y favorecer la desconexión con el trabajo en remoto.
Por este motivo, la compañía ideó una nueva estrategia para hacer sus oficinas más flexibles y colaborativas mientras se mantenga un sistema de trabajo presencial y a distancia durante la jornada.
La visión de Google para sus oficinas
El objetivo de la compañía es que los empleados se sientan parte de la empresa estando en la oficina o en casa y que se adapten a estos ‘puestos calientes’.
Google siempre ha estado a la vanguardia en cuanto a espacios de oficina se trata. De hecho se ha caracterizado por sus oficinas abiertas y divertidas con barras de comida gratuita, salas de juegos de mesa y transporte propio para los empleados.
Ahora, el reto es acabar con los puestos asignados e instalar ‘team pods’, módulos con ruedas que podrán reorganizarse según las necesidades del trabajo.

Las salas de reuniones de la empresa también sufrirán algunas modificaciones.
De hecho, la intención de Google es cambiarlas por semicírculos llamados ‘campfire’, donde los trabajadores a distancia se mostrarán en videoconferencia con una pantalla e intercalarán asientos con el personal presencial.
También optarán por turnos intercalados que eviten el contacto con los compañeros cercanos de escritorio.