El gerente de la Cámara Hondureña de la Industria de la Construcción (Chico), Silvio Larios, señaló la “urgencia” a hacer reformas a la Ley de Vivienda, ante las pocas oportunidades para disminuir el déficit de vivienda y aumentar la oferta.
La cámara empresarial indicó que el déficit de vivienda sigue creciendo en Honduras. En ese sentido, recordó que en 2022 se solicitó atención al rubro para unas eventuales reformas a la Ley de la Vivienda en el Congreso.
“Esperamos que este 2023 se pueda avanzar y se tengan las modificaciones necesarias”, enfatizó.
Para la Chica, las reformas urgen para poder trabajar en los distintos niveles económicos, desde las viviendas más básicas hasta las más altas exigencias.
El déficit de vivienda en Honduras se estima en más de un millón 300.000 unidades habitacionales y con las reformas se podría pasar a unas 25.000 unidades construidas, a 100.000 unidades al año.
“No se puede parar la economía, se debe recordar que el sector construcción mueve mucho el mercado y la oferta es muy poca mientras que la demanda es muy alta”, puntualizó el directivo.
Fuerte de preocupación

Larios señaló a inicios de año que luego de un año de Gobierno, siguen en “restructuración y un letargo”, aún no se están dando las condiciones para la inversión nacional y externa.
Además, calificó que el 2022 fue un año con muy poca la inversión en infraestructura y con la escasa, hubo mucho desorden.
La fuerte preocupación del sector construcción obedece a que es uno de los sectores que más influye de forma positiva sobre otros sectores de la economía y generación de empleos.
Aun así, no ven que la inversión fluya en Honduras, y eso resta competitividad y afecta la economía en general, comentó.
El Gobierno debe adoptar políticas urgentes para hacer cambios y que priorice la inversión y que “los pocos fondos” que se destinan a la infraestructura se aprovechen.
“Siempre terminan inflados porque lo presupuestado no alcanza y sin planificación los costos se disparan”, puntualizó Larios.