Dos hombres árabes recibieron una condena en Dubai por engañar a un inversor con 422.000 dirhams (US$15.000), después de que le ofrecieran la oportunidad de invertir en un proyecto inmobiliario en Turquía.
En total, se estima que defraudaron a unas 600 personas y obtuvieron de forma fraudulenta 300 millones de dirhams (US$81,6 millones).
El Tribunal de Delitos Menores de Dubai los condenó a un mes de prisión y les ordenó devolver la cantidad incautada de manera fraudulenta. Este veredicto lo confirmó un Tribunal de Apelación.
Según los registros policiales, un inversionista presentó una denuncia en la que afirmaba que había sido estafado por un desarrollador inmobiliario para un proyecto fuera del país.
Dijo que se había puesto en contacto con los dos acusados porque afirmaban que eran los gerentes de la empresa de bienes raíces, para que pudiera comprar una propiedad. Le sugirieron que comprara una vivienda en Turquía, a lo que accedió.
Sin embargo, la empresa no cumplió con los términos del contrato y el inversor no recibió acceso a la propiedad.
Cuando los dos acusados continuaron aplazando y no pudo acceder a la propiedad que supuestamente había comprado, presentó una denuncia policial.
Las investigaciones revelaron que la empresa era falsa. Había establecido oficinas en todos los emiratos y publicó anuncios en varios periódicos como medio para promover proyectos ficticios fuera del país.
Los condenados, a través de la empresa falsa, pudieron defraudar a unos 600 inversores y obtener de forma fraudulenta un total de 300 millones de dirhams (US$81,6 millones).
