El sur de Florida podría convertirse en el peor lugar de EE. UU. para los inquilinos para fin de año, en parte porque los salarios no se mantienen a la par con los exorbitantes aumentos de alquiler, según muestra un nuevo pronóstico.
Es probable que los inquilinos dediquen el 40% de sus ingresos a alquilar antes de fin de año, según un pronóstico de Zillow, un mercado inmobiliario en línea que estudia las tendencias inmobiliarias.
Eso sería un punto porcentual completo por encima de junio y muy por encima del 30% que prescriben los asesores financieros.
“Se convertirá en el mercado de alquiler más inasequible de EE. UU a medida que finalice el año, ya que los precios de alquiler y los ingresos de los inquilinos no pueden mantenerse al día”, dijo Nicole Bachaud, analista de datos económicos de Zillow.
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Los sueldos y salarios aumentaron un 2,9% en el sur de Florida entre junio de 2020 y junio de 2021, en comparación con el 3,5% a nivel nacional, según la Oficina de Estadísticas Laborales de EE. UU. Mientras tanto, el índice de precios al consumidor de la vivienda en la zona subió un 3,5%.
Discrepancia entre salarios y precio de alquiler
“Los salarios que se pagan tienen poca relación con la capacidad del trabajador para pagar ese alquiler mensual”, dijo Edward Murray, director asociado del Centro Metropolitano Jorge M. Pérez, de la Universidad Internacional de Florida.
Los trabajadores de servicios, la mayor parte de la fuerza laboral del sur de Florida, han recibido solo unos pocos dólares en aumentos salariales por hora, mientras que los alquileres incrementaron de manera constante, dijo Murray.
Por ejemplo, los alquileres de apartamentos en Fort Lauderdale aumentaron un 17% durante el año pasado, mientras que los alquileres de West Palm Beach aumentaron un poco más del 18%, según datos de Apartment List. Miami vio un aumento del 19% en los alquileres durante el año pasado.
Para poder pagar un lugar para alquilar, algunas personas recurren a cofirmantes para un contrato de arrendamiento o agregando un compañero de cuarto a la combinación, dijo Carolina Gerdts, vicepresidenta ejecutiva de RelatedISG Realty.
La discrepancia entre el aumento de los salarios y los alquileres ha obligado a muchos inquilinos a ser “desalojados silenciosamente”, dijo Murray, lo que significa que se vieron obligados a irse porque no podían pagar un contrato de arrendamiento a medida que aumentaba el precio.
